Britney y Justin, ¿ha existido alguna vez una pareja más perfecta? Ambos eran jóvenes, talentosos y exitosos, se conocían desde pequeños y se veían completamente adorables juntos, ¡hasta la ropa que usaban combinaba a la perfección!
En los inicios de la relación, su amor parecía salido de un cuento de hadas. Sin embargo, el idilio duró poco, y la mirada pública complicó aún más las cosas. Historias de infidelidades, venganzas y peleas empezaron a circular, y los medios no apartaron la atención de esta pareja hasta su triste final, en el año 2002.
Por esa época, todas las hipótesis apuntaban a Britney como la causante de la separación. Se decía que su súbito salto a la fama la había llevado a alejarse de su novio (y a acercarse, quizás demasiado, a su coreógrafo Wade Robson).
Como si todo este drama no fuera suficiente, el descorazonado Justin se aseguró de ilustrar la intensa situación sentimental en el videoclip de su canción “Cry Me A River”.
Pero allí no terminó la historia. Más de 15 años después, otra versión de los hechos salió a la luz. Al parecer, durante la tormentosa separación, Justin comenzó a frecuentar a otra mujer, perteneciente al equipo de baile de NSYNC: Jenna Dewan.
Además de bailar junto a la icónica boy band, Jenna trabajó con músicos como Janet Jackson, Missy Elliott, Ricky Martin y Sean Combs, entre otros, y protagonizó el film “Step Up” (2006), donde conoció a su actual marido Channing Tatum.
En su momento, las circunstancias despertaron algunos rumores que no llegaron a confirmarse. Pero en una reciente aparición en el show “Watch What Happens Live With Andy Cohen” Jenna reveló que efectivamente había tenido un romance con Justin en el año 2002: “Éramos amigos... y salimos”, dijo la actriz, avergonzada y orgullosa a la vez.
De todas formas, Dewan asegura que no fue ella la culpable de que la pareja de ensueño se separara. ¿Cuál crees que fue el verdadero motivo de la ruptura?
